Proviene del latín y la consumimos con bastante regularidad; pero no todas las ensaladas son ligeras ni forzosamente saludables. Checa las ocho reglas para preparar correctamente este platillo que ha evolucionado con el paso del tiempo.
Las cosas han cambiado en la cocina y las ensaladas ahora son mucho más que lechuga, jitomate y aceite de oliva. Aunque ningún platillo tiene nada de malo, sabemos que lo que te interesa es consumir los nutrientes correctos sin perder demasiado tiempo, que sepan bien y no te aburran al cabo de tres días.

Las ocho reglas para una ensalada saludable
1 Incorpora una mayoría de alimentos frescos de origen vegetal. No pierdas de vista que la ensalada básica lleva verduras como la lechuga y el jitomate. Estos ingredientes aseguran una mayor cantidad en agua, fibra, vitaminas, minerales y fitonutrientes que dan las características saludables.
2 No necesitan cocinarse, se preparan con alimentos crudos. Esta era de sus características más deseables, pues no requería invertir demasiado tiempo. Esto cambia al momento de agregar alguna proteína como pollo o carne.
3 Lleva una base de lechugas o vegetales de hoja verde. No es obligatorio, pero esto le otorga la definición al plato como ensalada.
4 Tiene varios colores. El rojo del jitomate, el verde de las espinacas o lechugas, el amarillo de los pimientos, el naranja de la zanahoria, el morado de la col o cebolla, el negro de las aceitunas…. Combina cuanto puedas, tanto por beneficios como por sabor.
5 Los ingredientes son de buena calidad. Procura que sean ingredientes frescos. Los congelados también son una buena alternativa, sólo fíjate que no traigan demasiados conservadores.

6 El aderezo de una buena ensalada favorece el sabor de los ingredientes, no los oculta. No necesitas inundar de salsa o aderezo tu platillo para comerlo.
7 No necesita mucha sal. El sabor proviene de los ingredientes, no es necesario salpimentarlo en exceso.
8 Es un plato ligero, rico en agua y fibra con bajo valor calórico. Puedes comer un gran plato de ensalada si sabes combinar los alimentos para equilibrar carbohidratos, grasas, proteínas y vitaminas. Puede ser tan exótica´ como quieras, ahí radica su riqueza nutricional pues da una sensación de saciedad sin dificultar la digestión.
Evita hacer ensaladas con más de cinco ingredientes, seis si incluyes el aderezo. La ensalada perfecta permite degustar el sabor de cada ingrediente. Si le pones demasiadas cosas perderás sabores, dificultarás la digestión y aumentarás el número de calorías.