La reducción de peso es lo que suele importar a la mayoría de las personas. La dieta moderna y el sedentarismo no colaboran para mantener el peso dentro de los parámetros saludables, aun así, la responsabilidad es de cada quien tuya. Si tienes sobrepeso, aquí te dejamos la llave para que abras la puerta hacia un mejor estilo de vida.
Ejercicio y conciencia de lo que comes son el primer nivel de acción. ¡Ojo! Las dietas hipocalóricas o con muy bajo contenido energético deben ser realizadas bajo estricta vigilancia de un nutriólogo. Por lo tanto, las recomendaciones que sí podemos darte son:
1 Consigue un plan de alimentación y actividad física personalizado. No el de un amigo, no el de Brad Pitt o Margot Robbie, tampoco el de tus hermanos. En serio, cada cuerpo es distinto.
2 Come acorde a tus necesidades e intenciones. No necesariamente menos es mejor.
3 Procura una alimentación saludable, esto es, no se trata de que dejes todo cuanto te gusta, pero “prefiérelo” y haz énfasis en la moderación.
4 Aumenta el consumo de fibra a través de verduras y frutas. Dale este regalo a tu estómago para que trabaje adecuadamente.
5 Disminuye el consumo de sal, azúcares y grasas. De verdad, no es “eliminar”; ¡sólo bájale!
6 Restringe las grasas saturadas como carnes grasosas, quesos maduros, productos lácteos enteros, manteca, mantequillas, margarina y aceites.
7 Utiliza aceites vegetales como el aceite de oliva y consume aguacate, almendras y nueces que son fuente de energía.
8 Respeta los horarios de comida. Olvídate de comer “cuando te acuerdas” o “cuando te da hambre”. Establece horarios para tres comidas y dos entremeses.
9 Come despacio. El estómago no tiene por qué hacer la función que le corresponde a la boca. Toma porciones pequeñas y apoya el tenedor en el plato después de cada bocado.
10 Cuida la preparación de los alimentos. Intenta no consumir alimentos fritos, capeados, empanizados o con salsas cremosas.
Rutina quema grasa para principiantes
Para derretir grasa y bajar de peso te entregamos dos excelentes rutinas. Ambas implican un calentamiento dinámico de cuatro minutos y un entrenamiento que dependerá de ti en cuanto a cantidad. Ahora te explicamos.
RUTINA 1
Iniciarás con un TABATA como calentamiento, o sea, 20 segundos de trabajo por 10 de descanso, durante cuatro minutos. Los ejercicios para el calentamiento son: crunch cruzado y plancha en tres puntos. Se trata de un bloque de 8 rounds. Por lo tanto, cada ejercicio se repite cuatro veces.


Al terminar tómate dos minutos de descanso para comenzar con el entrenamiento, el famoso “Dead by burpees”, donde durante el primer minuto harás un burpee y descansarás el resto de ese minuto. Durante el segundo harás dos, en el minuto tres harás tres y así sucesivamente. Tu descanso será todo lo que quede de tiempo hasta que se agote el minuto en cuestión.


La prueba no es fácil. Tal vez sólo llegues al minuto siete u ocho (con sus respectivos burpees). No importa. Es también una medición para establecer tu punto de partida. A partir de aquí sólo es mejorar.
RUTINA 2
Iniciarás con un TABATA como calentamiento, es decir, 20 segundos de trabajo por 10 de descanso, durante cuatro minutos. Los ejercicios para el calentamiento son: sentadillas libres y salto de cuerda o jumping jacks.


Al terminar tómate dos minutos de descanso para comenzar con el entrenamiento, el cual será un bloque FOR TIME de cuatro a seis series (tú elige cuántas) haciendo 12 desplantes alternados, 12 lagartijas y 12 toques de rodilla en posición de plancha.

Recordatorio. Las rutinas son sugerencias para que te actives. No sustituyen la asesoría o seguimiento de un especialista en salud, nutrición o entrenamiento. Si eliges seguir esta rutina, recuerda que debes cambiarla al poco tiempo pues perderá su efectividad en cuanto tu cuerpo se habitúe a ella.